Este es el comentario que quise hacer en el blog (voces y razones) del presidente de la Junta de Extremadura y que Guillermo se negó a publicar porque incluye (según él) ofensas personales. Como imaginé que iba por lo de "represora" Pereira (que es un calificativo, no un insulto: ella maneja la policía que reprime en días de Extremadura a manifestantes pacíficos o a la que sella un pueblo donde se dan unos conciertos antirrefineros que n le hacen gracia) omití la descripción de la delegada del gobierno y llamé al tito por su nombre, no fuera que tito también se considerara insulto. El caso es que ni así. Parece ser que cordialidad para algunos significa sólo elogios, parabienes y lameculismo. Ahí va:
Bufff!!!
Cuánto nacionalismo español (que este según parece no es malo ni es nacionalismo) y cuánto regionalismo de lo mío es lo mejón!!!
Y todo por un fotomontaje de una página que hace bromas políticas publicado en su blog PERSONAL por un concejal de un pueblo perdido por ahí y por una salida de tono de otro político sin cargo alguno en la que no insulta al pueblo español, sino que dice que es de malnacidos ser desagradecidos, refiriéndose a la clase política que maneja Extremadura.
Y todo para no entrar en el quid de la cuestión: seguimos a la cola de todo, no incrementamos población y aún así el empleo sigue en
Y, ojo, que no digo que haya que cumplir a rajatabla el Estatut catalán, porque es una ley que no tenemos la obligación de cumplir, que yo sepa, a mí no me preguntaron si estaba de acuerdo en los artículos que no hablan solo de Cataluña, sino que injieren en los asuntos de otros territorios, como la bilateralidad a la hora de negociar, que se saca de la manga que una ley catalana puede excluir al resto de negociar también por la puta cara. Vamos a una nueva financiación, vale, pero si no se puede recaudar para la región por la vía anterior (tetaestado)tendrán que dejarnos legislar en Extremadura como queramos sobre asuntos financieros. Ya que vamos a lamernos cada uno nuestro autónomo cipote, tratémonos entonces como lo que vamos a ser, extranjeros, y gravemos a las empresas que tributan fuera como queramos, que no hay miedo, que no están aquí para apadrinarnos, que no son ONGs, que nos conocemos. Otra forma que no estaría de más, ya que el gobierno es muy blando y tiene miedo a la socialización, pues, venga, desde el principio público, para no tener después que ser rojocomunistasantiespañoles: que los paneles solares que están cubriendo Extremadura (al menos los que ocupan terrenos públicos)sean de propiedad pública, de una empresa pública extremeña que nos haga la electricidad más baratita. Pero no caerá esa breva.