Cuando os habéis cruzado media África, os han molido a palos y casi os habéis ahogado en el AquaCemeteryPark del Mediterráneo no es de buen gusto que lleguen las cámaras y os pillen riéndoos, comiendo o, si sois chiquillos, jugando. Hay que cuidar las formas y llorar cuando un blanco se acerca con un cacharro de esos que roba almas.
Tampoco es de recibo eso de que estés en Gaza entre ruinas y te estés haciendo fotos con tu móvil, mientras entras con tu flamante uniforme nuevo al cole con tus compañeros.
Y, ¿Qué es eso de tener Twitter cuando eres un muerto de hambre? A pedir se va con cara de cristiana sumisión, sin mirar los ojos de la señora que te mantiene con su caridad y sin chistar. A mandar, don Pedro, que para eso estamos.
¿Y votar? os dejan votar y en vez de a los hombres de bien de toda la vida votáis desarrapados...
Pues así es. Os quieren (nos quieren) buenos y sumisos. Y vosotros, en vez de plantar cara y decir: sí, qué pasa, yo escribí esto o aquello, ¿algún problema?, váis pidiendo perdón por existir y borrando el pasado de alegría, llanto, rabia, humor negro, escatología o lo que quiera que sea que os dio por hacer y decir cuando fuera, que bien o mal estaría y allí tendría que quedarse. No lleváis ni una semana y ya os tienen cautivos y desarmados, como les han gustado siempre a ellos los rojos. Jugáis a su juego, con sus reglas y encima os parece de puta madre. Ya estáis dentro, ya tocáis escaño y ya empezáis a desteñiros, y encima motu proprio. La legalidad os va a comer y acabaréis dimitiendo por encima de vuestras responsabilidades. Mientras se llevan a Alfon como otro preso político más, a vosotros os preocupa no ser políticamente incorrectos en los estándares de esta 2ª Restauración Borbónica.
Espero que cambiéis, que enseñéis los dientes, defendáis y desobedezcáis cuando sea justo y necesario. Espero que no os domestiquéis.
Que no seáis buenos.
Tampoco es de recibo eso de que estés en Gaza entre ruinas y te estés haciendo fotos con tu móvil, mientras entras con tu flamante uniforme nuevo al cole con tus compañeros.
Y, ¿Qué es eso de tener Twitter cuando eres un muerto de hambre? A pedir se va con cara de cristiana sumisión, sin mirar los ojos de la señora que te mantiene con su caridad y sin chistar. A mandar, don Pedro, que para eso estamos.
¿Y votar? os dejan votar y en vez de a los hombres de bien de toda la vida votáis desarrapados...
Pues así es. Os quieren (nos quieren) buenos y sumisos. Y vosotros, en vez de plantar cara y decir: sí, qué pasa, yo escribí esto o aquello, ¿algún problema?, váis pidiendo perdón por existir y borrando el pasado de alegría, llanto, rabia, humor negro, escatología o lo que quiera que sea que os dio por hacer y decir cuando fuera, que bien o mal estaría y allí tendría que quedarse. No lleváis ni una semana y ya os tienen cautivos y desarmados, como les han gustado siempre a ellos los rojos. Jugáis a su juego, con sus reglas y encima os parece de puta madre. Ya estáis dentro, ya tocáis escaño y ya empezáis a desteñiros, y encima motu proprio. La legalidad os va a comer y acabaréis dimitiendo por encima de vuestras responsabilidades. Mientras se llevan a Alfon como otro preso político más, a vosotros os preocupa no ser políticamente incorrectos en los estándares de esta 2ª Restauración Borbónica.
Espero que cambiéis, que enseñéis los dientes, defendáis y desobedezcáis cuando sea justo y necesario. Espero que no os domestiquéis.
Que no seáis buenos.