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miércoles, mayo 12, 2010

Tijeras asquerosas.

No me sean soeces y no piensen en un mano a mano de Fernández de la Vega y Chus Lampreave al leer el título de la entrada, que no van por ahí los tiros. Efectivamente, vamos a hablar de recortes varios.

Ya lo saben: el amo del Mundo Libre ha telefoneado a su Faldero por estos pagos y al chaval se le ha hecho el culo pepsicola, que además es una cosa como muy del imperio (la pepsi, claro). A Zp le ha faltado tiempo para dar el taconazo castrense y ponerse manos a la obra para empezar a jodernos a la griega. Ojo, al listo de la Moncloa no se le ha ocurrido nacionalizar ningún banco, ni eliminar las sicav, ni subir los impuestos a los ricos, ni imponer un sueldo máximo. No, sus recortes atacan por lo bajo, y se redondearán cuando dentro de nada suba el IVA. Mientras, los soldaditos españoles seguirán despilfarrando de lo lindo en Afganistán, en el Índico o donde al imperio o al capital le hagan falta, que esto para ellos es sagrado.

Y esto también lo saben (lo mío no es la última hora, qué le vamos a hacer): en Extremadura dos empresas recortan personal por la cara (mucha). Ere que ere, Gallardo quiere quitarse de encima a más de 200 trabajadores de su siderurgica en Jerez. No habrá recortes en ninguna otra de sus fábricas, sólo en la extremeña, donde la resistencia popular a su querida refinería ha conseguido frenarla y tenerla al borde de la muerte. Gallardo juega aquí al más vil chantaje a la ciudadanía extremeña. UGT habla de que lo que realmente busca Gallardo es precarizar el trabajo en la planta, cambiando empleos fijos por eventuales y subcontratas, y UGT no es precisamente sospechosa de ir contra el imperio Gallardo y su conexión en el gobierno extremeño, sino todo lo contrario. La junta aquí hace como que no pasa nada y no se le pasa por la imaginación tocarle un pelo al magnate extremeño, rey de las subvenciones públicas y mimado del PSOE. La otra empresa con ERE es Cetarsa. Pública y sin pérdidas, para más señas. Ahí anda el Estado, dando ejemplo, mandando al paro a un montón de trabajadores de Coria de la manera más rastrera posible. ¿Y qué hace la Junta? pues silbar, mismamente, mirando para el otro lado. Eso, y regalar medallitas al heredero Borbón, que ahí no hay recortes.